La actual provincia de Madrid era en el siglo XVI un mosaico de localidades que poco tenían que ver con la demarcación actual. Hallamos tanto territorios de las Ordenes Militares, de Santiago entre el Tajo y el Tajuña, como lugares de la juridiscción de Uceda y de Talamanca, señorios de Puñoenrostro y Chinchón, y para compensar, un poder de la Villa de Madrid que se adentraba en la actual provincia de Toledo, como un brazo de mar, hata Borox, y en otros casos, por otras cuestiones administrativas, penetraba en la actual Guadalajara, como ésta en Madrid, y también Avila, Segovia y Toledo.