El lunfardo es una variante lingüística particular. Se originó como ´argot´ entre delincuentes de los arrabales de la región rioplatense. Un análisis de los siete criterios de Bell (1976), a saber estandarización, vitalidad, historicidad, autonomía, reducción, mezcla y normas de facto, muestra que el lunfardo ha experimentado un avance espectacular. No es, y nunca ha sido una lengua, ni un sociolecto o un dialecto. Gradualmente, la definición ‘argot’ también dejó de ser adecuado para denominar la variante lingüística. Entonces, en la sociolingüística no existe una definición adecuada.