El diagnóstico de la Enfermedad de Alzheimer (EA) se lleva a cabo por exclusión. A menudo, los primeros síntomas de la enfermedad van acompañados de síntomas depresivos que son clínicamente significativos, lo que hace más difícil el diagnóstico diferencial; algunas veces, un trastorno diagnosticado como depresión puede ser en realidad una demencia (pseudodepresión); sin embargo, en otras ocasiones, un cuadro que inicialmente tiene el aspecto de una demencia puede ser en realidad un trastorno afectivo (pseudodemencia depresiva). Objetivos.